Vila-rodona - Las raíces del Camp
No os perdáis: la Bodega Cooperativa, obra de Cèsar Martinell, con la sala de exposiciones y la agrotienda; el Columbari, un monumento funerario romano único en el mundo; el Castell; el núcleo histórico del pueblo; el Museo; la orilla del Gaià; la Farga, y el antiguo Convent dels Dolors.
Vila-rodona, la Vila, siempre se ha relacionado con el vino y, ahora, con el cava. La entidad más importante del pueblo es la Bodega Cooperativa y Sección de Crédito de Vila-rodona, una de las cooperativas más grandes del país. Conserva la bodega original, proyectada por el arquitecto Cèsar Martinell, que veréis justo a la entrada del pueblo. Acceded a los antiguos lagares y visitad un modesto pero atractivo Museo del Vino. Podéis reservar la visita guiada en la misma bodega. También encontraréis una excelente agrotienda.
Por el camino del Columbari llegaréis a este monumento funerario romano, único en el mundo por su arquitectura. El Columbari está relacionado con un rito religioso funerario: la incineración. El Columbari de Vila-rodona presenta, en la parte inferior, el estilobat, hecho con una piedra de la zona y decorado con arcuaciones de siete ladrillos cada una que descansan encima de unas columnas rudimentarias. Es por esta característica que el Columbari es único en el mundo. Podéis hacer una visita guiada si lo solicitáis en el Ayuntamiento. También podéis aprovechar los actos que en él se organizan con motivo del festival de recreación histórica Tàrraco Viva.
En la parte más alta de la villa, en un cerro que domina una amplia terraza sobre el pueblo y el río Gaià, está el castillo, el origen del cual hay que situar a caballo de los siglos XI y XII. Actualmente es de propiedad privada.
Pasead por la villa y no os perdáis la antigua Pescaderia, situada a tocar de la plaza dels Arbres, un edificio a caballo del modernismo y el novecentismo. El exterior, rehabilitado, se ha pintado siguiendo el estilo de los dibujos modernistas originales. La iglesia parroquial de Santa Maria es del siglo XVIII. El campanario, de 65 metros de altura, es uno de los más altos de Catalunya.
El Museo de Vila-rodona está dividido en varios ámbitos: la sala de geología, dedicada al estudio del terreno, cuenta con una colección de fósiles de la zona; la sala de historia repasa las diferentes etapas de la Vila y sus pobladores, y finalmente encontraréis una sala que recrea los diferentes espacios municipales: la casa, la escuela, el café y la plaza.
A tocar del pueblo encontraréis el antiguo Convent dels Dolors, de propiedad privada. Fue un convento de la Orden de los Servites o de los Sirvientes de Maria. Actualmente restan de pie los muros de la iglesia de Sant Llorenç. Un lugar casi desconocido es la Farga de Vila-rodona (BCIL). Situada junto al río Gaià, es del siglo XIII y, por la documentación que se conserva, sabemos que en el siglo XVI estaba en funcionamiento. Es de propiedad privada y en ella se celebran actualmente acontecimientos.
En Vilardida, pueblo agregado que Vila-rodona comparte con Montferri, está Cal Tudó, conocido también como el Castell de Vilardida.
El río Gaià y su entorno conforman un espacio natural de importante valor ecológico, paisajístico y social. Justo en la entrada del pueblo está l'Albereda, un magnífico bosque de álamos incluido en el Espacio Natural Protegido del Gaià. La alameda forma parte del recorrido del Camino de las Tierras del Riu Gaià y encontraréis unos plafones interpretativos de la flora y la fauna características de la zona.