Cinco cosas que no sabías de Santes Creus
Cinco cosas que no sabías de Santes Creus
Los vitrales románicos más antiguos de Europa
El de Santes Creus es el único monasterio que conserva un extenso conjunto de vitrales fechados a principios del siglo XIII, el más antiguo de nuestro entorno y uno de los pocos conjuntos de vidrio cisterciense que hay en toda Europa (estos vitrales son los del crucero de la iglesia). El rigor de la normativa de la orden cisterciense impuso la austeridad en el color y la ausencia de figuración y forzó un diseño geométrico muy elaborado. Mirad la diferencia de estos vitrales románicos con el gran vitral de la fachada, más coloreado, con pequeñas escenas de la vida de Jesús y de María, en la línea estilística del primer gótico.
El auditorio de Santes Creus
Los conciertos de Santes Creus se realizan en el antiguo dormitorio de los monjes por las características arquitectónicas y acústicas que hacen que la música encuentre el mejor sonido; al anochecer en verano, los murciélagos vuelan al ritmo de los violines: un espectáculo mágico.
El monasterio perfecto
La gran diferencia entre el monasterio de Santes Creus y el de Poblet es la situación de la iglesia respecto al claustro: en Poblet está en el lado opuesto a Santes Creus porque no sigue el modelo de Sant Bernat de Claravall. El de Santes Creus es el monasterio que reproduce con más fidelidad el plan bernardino de construcción.
El rey que vive en Santes Creus
Pere el Gran fue uno de los reyes más destacados de Catalunya. Su tumba -una de las dos del crucero- restó intacta a lo largo de setecientos años; todo un récord. El sepulcro de Pere el Gran, enterrado en el Real Monasterio de Santes Creus desde 1285, es una de las pocas tumbas de linaje real europeo que no había sido exhumada y la única no expoliada de los reyes catalanes. Es el sepulcro de la bañera de pórfido rojo. Las intervenciones que se llevaron a cabo en 2015 llegaron a la conclusión de que el rey Pere era un hombre de una altura destacable por la época, entre 175 y 180 cm, tenía la cara alargada y quizás el cabello rubio. Concluida la investigación, volvió a su bañera real.
Los capiteles que hablan
Los capiteles escultóricos del claustro mayor del monasterio de Santes Creus son uno de los compendios de escultura gótica más curiosos de Europa. A diferencia otros monasterios que tienen los capiteles decorados con motivos florales, el escultor Reinard des Fonoll hizo figuras animales y humanas, mitológicas e incluso cómicas. Son esculturas parlantes: todas dicen cosas, todas tienen un misterio a menudo muy evidente. ¿Te atreves a descubrirlo?